Renovar le baño "casi" sin obras

1. Un suelo hecho realidad

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   Lo primero que ya no puedes aguantar en el cuarto de baño es ese suelo desgastado que evoca una barraca más que otorgar un toque vintage. Si eres un manitas, que sepas que existen soluciones rápidas y baratas para sustituirlo, como los azulejos vinílicos apto para baños: son autoadhesivos e imitan materiales más nobles, como el mármol o la madera, y como todos los revestimientos vinílicos, son resistentes a la humedad y se friegan sin problemas.

   Sin embargo, para un resultado profesional, siempre es preferible ponerse en las sabias manos de los expertos – ¡aquí nos tienes! –, a los que les podrás pedir que instalen encima del suelo original uno de vinilo o un laminado impermeable, siendo este último resistente al desgaste y de fácil mantenimiento.

      

   Finalmente, si tu presupuesto es un pelín más alto, también puedes decidir revestir los viejos alicatados con hormigón pulido, y extenderlo a la ducha misma para un acabado very cool.

2. Píntame mucho

   El techo y las paredes del cuarto de baño ya no pueden con su situación y te piden a voces que les restaures. Las soluciones sobran, y hay una para cada presupuesto.

   Para devolver los azulejos a la vida, píntalos con una pintura apta para alicatado. Si las paredes son lisas, puedes optar por colocar papel pintado especial para baños (¡ojo! ¡También existe para el suelo!) del color o del estampado que más te guste, o que imite la textura de materiales más caros, como la cerámica, para un aseo de lujo. Y si eres amante del arte, hasta puedes plantearte decorar las paredes del baño con vinilos decorativos de tu artista favorito.

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   Asimismo, las baldosas y las cenefas autoadhesivas representan una excelente opción para liberar el diseñador de interiores que vive en ti. Por último, no nos olvidemos del señor microcemento, un material de cemento pigmentado que se puede colocar directamente sobre cualquier suelo preexistente – un verdadero juego de magia.

3. Operación espacio

   Ya que has decidido remover las aguas y cambiarle el aspecto al cuarto de baño, mejor aprovechar la ocasión para reorganizarlo todo.

   Si tu presupuesto te lo permite, hay dos cosas que puedes hacer y que te harán ganar más espacio en el baño: si todavía no la tienes, sustituir la clásica puerta por una puerta corredera que desaparecerá mágicamente al empujarla con tu índice; cambiar la bañera por un plato de ducha, para tu mayor comodidad a la hora de asearte – también existen soluciones a precios módicos.

       

   Y ahora los muebles. Si eres un desordenado empedernido y te cuesta la vida mantener el orden y siempre siempre siempre, al terminar de hacer tus cositas en el baño, parece que hubo una riña, a lo mejor necesitas almacenaje extra y que cada cosa encuentre su sitio definitivo. Hay dos opciones:

   La primera, realizar muebles a medida de baño, para aprovechar cada rincón útil y para ponerlos en donde más te guste – por ejemplo, una columna suspendida, con puerta de cristal que te permita localizar lo que necesites en un pispás, o incluso una balda de madera o un banco en donde colocar cestas del material y del color que combine con el estilo de tu baño.

   La segunda, darle alegría a los viejos muebles, repintándolos o dándote al découpage – y si piensas que es una actividad para viejitas, pues te equivocas: ¡esperamos tus comentarios de satisfacción! En realidad, existe una tercera opción: elige un carrito auxiliar o ganchos con cestas para organizar tus productos y utensilios de aseo y de belleza y verás lo rápido que será agarrarlos para ponerte guap@.

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4. Iluminación … divina

   Con el fin de tener una buena primera impresión de ti al levantarte, te aconsejamos que no descuides de la iluminación del cuarto de baño.

   Comprueba que la disposición de focos, apliques y lámparas esté correcta para no crear sombras que afeen tu cara bonita, y asegúrate de que respondan al Índice de Protección (IP) alto para el baño – al menos IP44, que indica la resistencia al agua. Además, utiliza bombillas de tipo LED y te ahorrarás una pasta en gastos eléctricos.

   

5. Lo imprescindible de los complementos

   No hace falta que te digamos que, al cambiar elementos como la alfombrilla, el jabonero o la cortina de la ducha/bañera – mejor si puedes sustituirla con una mampara de cristal para una mayor sensación de modernidad y de limpieza – la imagen de tu baño va a modificarse radicalmente en un abrir y cerrar de ojos.

   Simplemente acuérdate de que reformar el cuarto de baño también es una oportunidad para expresar tu personalidad: elígelos únicos y/o a juego, y todo parecerá extremadamente cuidado.

   De todas formas, sí que queremos destacar que hay dos elementos que le harán creer a quien se meta a tu baño que lo has sometido a una reforma integral: la grifería – la hay para todos los presupuestos –, y los espejos – deléitate con las formas, las dimensiones y el número. ¡Ah! Y no te olvides nunca – y subrayamos, nunca – de la ventilación del baño, y siempre cerciórate de que huela a campo … de flores.

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¿Listo para reformar tu baño? Ya no tienes excusas para convertirlo en un lugar agradable, higiénico, funcional.